Como podéis ver están plagados de gente y en ellos se venden mucha artesanía
..., huevos de pascua
..., comida artesana
..., algún que otro huevo de pascua
..., chocolate
... y como no, los auténticos y genuinos ¡¡huevos de pascua!! -había un montón os lo prometo-
También había sitios para comer, entre ellos una tienda de Bertzels. Para el que no lo sepa son unos lazos de pan tiernos con sal muy típicas de Austria y Alemania. En Estados Unidos también las comen, pero son más duros, rollo picos, y están bastante malos. Sin embargo aquí están muy ricos.
En este puesto en concreto los había de muchos tipos, además de los tradicinales. Con chocolate y almendras, chocolate y coco, de bizcocho, con queso (pizza-bretzels se llamaban) y unos más grandes llamados party-bretzels (aquí tienen unas fiestas muy raras por lo que parece). Yo me decanté por probar el grande, que al fin y al cabo era uno normal, y uno de chocolate con almendras. Ambos estaban riquísimos. Podéis haceros una idea por el aspecto: